Los tensioactivos sulfonados, también conocidos como “sulfatos”, son agentes limpiadores que atrapan la grasa y las impurezas para limpiar el cuero cabelludo y la fibra capilar. Ampliamente utilizados en productos de limpieza como champús y geles de ducha, cuentan con excelentes propiedades limpiadoras y favorecen la formación de espuma en contacto con el agua. Su fuerte poder de limpieza te da instantáneamente esa sensación de cabello limpio.
¿CÓMO RECONOCERLOS?
Se encuentran en la lista de ingredientes (INCI) de la mayoría de los champús convencionales y se pueden reconocer con los nombres de Lauril sulfato de sodio (SLS) o Lauril sulfato de amonio (ALS).
Sin embargo, cuando se usan en dosis altas, ciertos tipos de sulfatos pueden irritar el cuero cabelludo y hacer que las puntas se rompan, por lo que el cabello se vuelve más frágil. En Yves Rocher, hemos optado por eliminar los sulfatos de todos nuestros champús y desarrollar fórmulas que lavan suavemente todo tipo de cabello, incluso los más sensibles.
Champús sin sulfatos pero que hacen espuma
Nuestros expertos en formulación han desarrollado una combinación de tensioactivos no sulfonados de origen natural (específicamente derivados del aceite de coco o del aceite de girasol) para lavar suavemente tu cabello respetando el equilibrio de tu cuero cabelludo y la longitud de tu cabello.
Estos ingredientes han sido cuidadosamente seleccionados para nuestra nueva gama de champús para mantener la eficacia y la sensorialidad. En la ducha, una espuma cremosa se extiende por el cabello y elimina las impurezas y el exceso de grasa, sin resecar el cuero cabelludo ni el cabello.
Champús sin sulfatos para todos
Los champús sin sulfatos, a menudo se recomiendan para el cabello teñido o con tratamientos de alisado.
En Yves Rocher, creemos que todos los tipos de cabello se merecen el mismo nivel de atención, comenzando por su champú.
Nuestros champús sin sulfatos son adecuados para todo tipo de cabello, lavan con suavidad y respetan el equilibrio de cada tipo de cuero cabelludo, preservando la película hidrolípidica de la fibra capilar.
Cambiar de champús convencionales a champús sin sulfato* puede requerir algo de tiempo para que el cabello se adapte. Durante los primeros días, tu cabello puede parecer menos brillante y más áspero. Después de algunos usos, verás los beneficios de nuestros champús sin sulfato. Nuestras fórmulas suaves, inspiradas en el mundo botánico, han sido desarrolladas para respetar el equilibrio de tu cuero cabelludo y proteger la fibra capilar.
FÓRMULAS AÚN MÁS ECOLÓGICAS
Todos nuestros champús están formulados sin sulfatos*, sin siliconas y son 100% veganos**. Nuestras fórmulas contienen más del 94% de ingredientes de origen natural.
*Sin tensioactivos sulfonados
**formulado sin derivados animales